jueves, 13 de junio de 2013
paracharáttein tò nómisma
¿Toca al filósofo devaluar, "falsificar...", los valores tradicionales establecidos y convencionales?, ¿se buscan verdades por amor contemplativo o para armarse de herramientas prosódicas de intervención social subversiva? El paracharáttein tò nómisma era la tarea cínica. Según los estudiosos (1) era la expresión síntesis, como fórmula, del ideario de los filósofos cínicos antiguos. La célebre formula de Diógenes de Sínope. Sea como lema literal, como: "falsificar la moneda", acusación que el orden legítimo de Sínope lanzó contra el filósofo, o sea en su sentido metafórico como la intención de devaluar los valores tradicionales en pro de otros; sea en cualquiera de los dos sentidos, resume, dicen los estudiosos, el ideario del cinismo filosófico antiguo. Una posibilidad filosófica.
Sea, entonces, la literalidad de la "acción directa" o la diatriba verbal inquieta y subversiva, existe un camino filosófico que no busca sólo el saber por el saber mismo, sino que busca eróticamente, afectivamente, echar las redes verbales y prácticas de una nueva ética, de una nueva forma de vida. Camino posible, orientado por la convicción de que una sociedad más libre propone, prepara, predispone mejor el "escenario" social para la emergencia del pensamiento libre.
(1)Martín García y Macías Villalobos, Los filósofos cínicos y la literatura moral serioburlesca, 2008, Akal.
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